En el mismo día que Lifschitz presentó su lista “Adelante Santa Fe” como pre candidato a gobernador junto al radical Carlos Fascendini, quien lo acompañará en la fórmula, el ex ministro de salud de Binner se mostró en una charla sobre salud pública organizada por Javkin quien competirá por la intendencia.

Tal como adelantó La Política Online, en una secuencia más de las diferencias que minan por estas horas al Partido Socialista entre Hermes Binner y Miguel Lifschitz a quien intentaron desbancar de la pelea por la gobernación, el ex ministro, Miguel Ángel Capiello dio otra muestra de las complejas relaciones.

La foto, junto al pre candidato Pablo Javkin, fue interpretada como una señal inequívoca hacia el sector de Lifschitz, sobre todo a la intendenta Mónica Fein quien anhela renovar su mandato a pesar que aún no se ha hecho público el apoyo del partido.

A su vez, luego de tantos años de rispideces, la jornada organizada por la Coalición Cívica mostró un mínimo acercamiento al sector de Rubén Giustiniani y del radical Mario Barletta quienes apoyaron la candidatura de Javkin. Carta que aún deberá sortear el ex intendente si quiere evitar una sorpresa en la interna.

“Tampoco fue casual que el mismo día que se produce la presentación de la lista ‘Adelante Santa Fe’ de Lifschitz – Fascendini, haya una aparición pública de esta magnitud” confesó un dirigente del ARI

Por su parte, consultado por LPO, Miguel Capiello desdramatizó la lectura electoral de la situación: “es del Frente Progresista Cívico y Social que pidieron de la boca del tipo que trabajó tanto en salud para que exponga cómo es el sistema, sólo hablé de salud, de lo que hicimos en provincia y municipio” expresó.

“Puedo ir a hablar a cualquier lugar, obvio que discuto política en ciertos lugares o dentro de mi partido, pero cuando voy afuera hablo de salud y Javkin está dentro de las PASO del FPCyS” agregó el médico.

Una candidatura postergada

El sanitarista Miguel Ángel Capiello acompañó en salud a Binner durante toda su gestión, previamente haber ocupado la secretaría correspondiente en Rosario. En las elecciones del 2013, a falta de pesos políticos propios en el Concejo Municipal, el Socialismo decidió desplazar a Capiello para que compita en la lista oficial.

Fue un golpe duro para el médico quien subraya en cada entrevista su formación y preparación en el área de salud y gestión.

Su experiencia estuvo al servicio de Hermes Binner a quien acompaña fielmente, no sólo durante los años de gobierno sino aún hoy y a pesar de ser concejal, fue el autor del proyecto del Sistema Único de Salud presentado por Binner en el Congreso nacional.

En su momento, su retracción al Concejo a pesar de su enojo, se concretó con la promesa de que sería el próximo candidato a intendente por el socialismo.

Sin embargo, Capiello no puedo proyectar su imagen en el órgano colegiado. Con un perfil de gestión, nunca se mostró cómodo negociando la labor legislativa y su candidatura se fue diluyendo con el paso del tiempo.

“Siempre estoy a disposición de lo que el Frente necesite. Hasta ahora no ha habido ningún ofrecimiento. Por ahora seguiré siendo el concejal más votado por los rosarinos” aseguró a LPO con un dejo de insatisfacción que aún evidencia.

En ese sentido, Capiello confesó a este medio su deseo de volver al Ministerio de Salud: “Yo me he capacitado, soy médico sanitarista, magister en sistemas de sector de salud. Si el ingeniero Lifschitz me necesita allí estaré”

“Capiello es el número dos en salud de la provincia. El número uno es Binner y lo sigue Capiello. Y la relación con Mario Drisum –su reemplazante en el ministerio- no son buenas” reconoció una fuente cercana al médico.

A pesar de las diferencias, Capiello evitó hacer pública las diferencias entre ellos: “el sistema está funcionando, quizá uno puede pensar diferente en relación a los gestores que están ahora, pero está dando respuestas, con falencias o no pero sigue avanzando” deslizó sutil evitando entrar en contradicciones profundas a pesar que, según averiguó este medio, Drisum evita hablar con Capiello hasta por teléfono.